la empresa. A su vez, colabora con la motivación de los empleados, generando un orgullo y un sentido de pertenencia.  Por último, mejora la calidad de vida de las comunidades al responder a algunas de sus necesidades más cruciales. En resumen, es una relación ganar- ganar entre empleados y comunidades.

 

Ser Voluntario Corporativo significa renunciar a un tiempo propio en pos del bien de una comunidad. Es tener la posibilidad de generar un valor agregado y participar en tareas diferentes a las que desarrolla laboralmente, mostrar otras capacidades, y completarse como personas.  El voluntariado corporativo brinda la posibilidad a los empleados de realizar tareas solidarias que de otra manera no podrían por falta de tiempo o logística. Es un espacio importante para reforzar la satisfacción de los empleados.

 

En Nestlé queremos que los colaboradores encuentren un lugar donde satisfacer sus inquietudes sociales. Nuestra estrategia de Voluntariado Corporativo está alineada con el concepto de Creación de Valor Compartido, principio corporativo fundamental que guía el accionar de Nestlé.  Se trata de un modelo que considera que para tener éxito a largo plazo se debe generar valor en forma simultánea para la compañía y para la sociedad.

 

El desarrollo del modelo de “Creación de Valor Compartido” se enfoca en el análisis de la cadena de valor de la compañía, desde los proveedores hasta la comunicación con el consumidor. A partir de este estudio, se identificaron áreas en las que se cruzan el interés de los accionistas y el de la sociedad, y en las que la creación de valor puede ser optimizada por ambos. Como resultado, la compañía definió enfocarse en las siguientes áreas: Nutrición, Agua y Desarrollo Rural. Reducir el consumo de agua, mejorar la nutrición y ayudar al crecimiento de las comunidades rurales constituyen objetivos tan esenciales para la estrategia comercial de la compañía como lo son para la creación de un mundo más sano.

 

Buscamos que los programas de Voluntariado Corporativo estén principalmente alineados con las necesidades que las comunidades locales tienen dentro de los tres pilares en los que se decidió enfocarse.  De esta manera, todos nuestros esfuerzos y recursos están orientados en una misma dirección lo que permite que las acciones se potencien sin perderse como tareas aisladas.

 

Para que el voluntariado corporativo funcione es importante que tengan una estrategia detrás y un sentido. Deben estar planificados y correctamente estructurados para que no impliquen una pérdida para la empresa o para que los empleados no se frustren al ver que no funciona. Un buen plan, que incluya cantidad de horas establecidas por mes y actividades por hacer, y una buena comunicación interna hacen que el voluntariado corporativo sea un ganar - ganar para todas las partes involucradas.