Después de una investigación sobre la necesidad habitacional en el área metropolitana de Buenos Aires, la Hábitat para la Humanidad Argentina se centró en uno de los tantos grupos vulnerables: los que viven en condiciones inadecuadas de vivienda en conventillos, inquilinatos y hoteles tipo pensión. 

Son familias, en general, lideradas por mujeres que prefieren este tipo de contención a la situación de villas o asentamientos. No pueden acceder a un alquiler de mercado, aún teniendo ingresos que pueden afrontar su valor. No solamente por falta de garantías propietarias, sino por cantidad de hijos o simplemente por ´portación de rostro´. De esta manera, quedan excluidas del mercado formal. “Si bien este proyecto recibió varios premios, no pudimos llevarlo a cabo porque es muy difícil convencer a propietarios que alquilen su vivienda a personas sin garantías, por una fuerte cultura de propiedad y por discriminación”, explica Ana Cutts, Directora Nacional de Hábitat para la Humanidad Argentina (HPHA).

 

Dada esta situación, decidieron buscar oportunidades inmobiliarias para estas familias, y así surge “Reciclando Hogares Urbanos” que pretende reciclar inmuebles precarios o en desuso para transformarlos en departamentos adecuados y aprovechar así las oportunidades inmobiliarias en beneficio de los más vulnerables.

 

A sólo dos cuadras de La Bombonera, la organización puso en marcha un proyecto sustentable, replicable y novedoso: el reciclaje y alquiler tutelado de conventillos y hoteles pensión de la Ciudad. Este modelo de solución habitacional es un puente entre la marginalidad y la formalidad para nuevas familias. Además, el proyecto se propone incentivar a gobiernos y actores privados a replicar esta metodología.

 

La primera vivienda adquirida por HPHA se encuentra en Hernandarias 674 (La Boca). Era un condominio en condiciones precarias, que luego de años de perseverancia para conseguir los permisos, fue totalmente remodelada: hoy cuenta con estructuras sólidas, instalaciones de servicios seguras y un espacio cultural en planta baja. Además, la fachada fue diseñada de manera que respete la estética del histórico barrio, con sus motivos y colores. Representa una solución habitacional novedosa para descomprimir los edificios hacinados y poner en funcionamiento espacios urbanos caídos en desuso. “Desde hace 4 años que estamos construyendo este edificio, se hace difícil construir como una ONG ya que

no tenemos ningún tipo de privilegios ni incentivos”, asegura Cutts y agrega: “Ya hay dos familias viviendo en los primeros pisos, pero todavía nos faltan terminaciones en los últimos pisos”.

 

Por otro lado, desde 2011, HPHA brinda talleres a familias viviendo en estas condiciones para que se animen a buscar una solución habitacional más adecuada. Estos talleres incluyen aspectos de alquileres formales, derechos y obligaciones de las partes, de economía del hogar y vivienda adecuada. “Cuando las familias salen de la informalidad total, les damos posibilidades de alquiler pagando todo sin presentar garantías, y los acompañamos en el proceso de este cambio de estilo de vida con talleres”, explicó Cutts.

 

Cientos de familias fueron capacitadas en estos talleres, que el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires incorporó a su proyecto “Alquiler se puede”.

En el barrio de La Boca de la Ciudad de Buenos Aires, Hábitat para la Humanidad Argentina (HPHA) brinda soluciones habitacionales para familias que viven hacinadas en estructuras inadecuadas, sin posibilidad de acceder a un alquiler formal.